La secretaria de Energía de Santa Fe y vicepresidenta de la Liga de Provincias Bioenergéticas, Verónica Geese, expresó su preocupación por la falta de avances en la legislación de biocombustibles en Argentina, señalando que “ya estamos pasando el segundo semestre de este año y todavía no hay ninguna novedad a nivel parlamentario”. En diálogo con Tendencia de Noticias durante su visita a Tucumán, donde participó en la distinción de la Universidad San Pablo-T al economista brasileño Plinio Nastari con el título Doctor Honoris Causa, Geese enfatizó la necesidad urgente de una nueva ley de consenso que brinde estabilidad al sector bioenergético.
Geese destacó los esfuerzos de la Liga de Provincias Bioenergéticas para trabajar junto al gobierno nacional en la búsqueda de un acuerdo que beneficie a todas las partes. “Estamos trabajando con el gobierno nacional, tratando de llegar a un consenso. No un nuevo texto, pero sí los puntos en los cuales el gobierno nacional quiere modificar, cómo podemos negociar esas situaciones para tener una ley de consenso para cualquier inversión de largo plazo que tengan que hacer los ingenios, las industrias, todos lo relacionado a las bioenergías”, afirmó. Según la funcionaria, esta ley debe contar con el respaldo no solo del Congreso, sino también del Poder Ejecutivo, que será el encargado de reglamentarla y aplicarla.
Uno de los principales desafíos en las negociaciones radica en conciliar la visión desreguladora del gobierno nacional con las necesidades de una industria que requiere un período de transición. Geese explicó que “hay distintos tamaños de empresas, distintas realidades, los precios de las distintas materias primas, ya sea la caña de azúcar, el aceite de soja, el maíz, todo eso tiene precios diferentes, así que no puede manejarse de la misma forma en la que se maneja el mundo de la energía”. Los puntos críticos incluyen el corte de biocombustibles, los precios y los cupos, temas que la Liga prefiere manejar con cautela "para evitar debates públicos que compliquen el diálogo".
Extremos y una comparación necesaria
Otro factor que complica el panorama es la injerencia de las petroleras, un sector con gran influencia en las decisiones gubernamentales. Geese reconoció que “las petroleras tienen más diálogo o más llegada a todos los gobiernos nacionales”, pero destacó la importancia de que el Ejecutivo actúe como árbitro para garantizar un consenso que beneficie al país. “Todos sabemos que a los petroleros les gustaría que los biocombustibles no existieran. A los biocombustibles les gustaría que los petroleros no existieran, pero no podemos ir a ninguno de esos extremos. Tenemos que encontrar un lugar en el que esto pueda avanzar y además cumplamos con los compromisos ambientales que tiene Argentina en materia de cambio climático, si no nos vamos a ir quedando atrás”, afirmó con contundencia.
Geese comparó la situación de Argentina con la de Brasil, donde los biocombustibles han avanzado gracias a políticas de estado sostenidas desde los años 70. “En Brasil las políticas de estado permanecen. No importa si hay una dictadura, si hay alguien de izquierda, si hay alguien de derecha. Los temas importantes para el país tienen un consenso que atraviesa todas las gestiones”, explicó. Este enfoque permitió al país vecino consolidar su industria bioenergética, mientras que en Argentina las idas y vueltas políticas han frenado el desarrollo del sector. “Nosotros tenemos que poder hacer ese proceso con una estabilidad, entendiendo que los biocombustibles vinieron para quedarse porque sostienen a las economías regionales”, subrayó, destacando el impacto positivo en provincias como Santa Fe y Tucumán, así como la contribución a la independencia energética y las exportaciones argentinas.
A pesar de las demoras, Geese se mostró optimista sobre la posibilidad de contar con una nueva ley de biocombustibles antes de fin de año. “Queremos que este año haya una nueva ley de biocombustibles. Los gobernadores tienen un compromiso de tener una ley mejor a la que tenemos hoy. Esperemos que podamos llegar a un consenso y eso se vea reflejado lo más rápido posible”, afirmó. La funcionaria resaltó la importancia de que esta legislación no solo impulse la industria, sino que también garantice beneficios para los argentinos y cumpla con los compromisos ambientales del país.