El presidente de la Unión Industrial de Tucumán (UIT), Jorge Rocchia Ferro, lanzó un contundente reclamo por la falta de avances en la sanción de una nueva ley de biocombustibles, alertando sobre el impacto devastador que esta demora tendrá en las economías regionales del NOA, especialmente en Tucumán. “El norte argentino está en una situación límite y lo digo con total claridad: sin políticas concretas que fortalezcan nuestras economías regionales, el futuro será devastador”, afirmó Rocchia Ferro, subrayando la urgencia de medidas que promuevan el desarrollo productivo y social.
En un contexto donde “siete de cada diez chicos no comprenden un texto ni resuelven operaciones básicas de matemática”, el industrial tucumano advirtió que la región enfrenta una crisis agravada por el cierre de fábricas, suspensiones y reducción de personal. “Cuando termine la zafra, la crisis social será aún más grave”, sentenció, destacando que el azúcar y el bioetanol son la “columna vertebral” de Tucumán. “No tenemos petróleo, no tenemos minerales, no tenemos litio funcionando. Lo que tenemos es azúcar, y si no la defendemos con decisión, vamos a condenar a nuestra gente a la pobreza y a la emigración masiva”.
El presidente de la Compañía Azucarera Los Balcanes enfatizó la necesidad de ampliar el corte de bioetanol, actualmente en un 12% (6% maíz y 6% caña), para garantizar rentabilidad, sustituir importaciones de combustibles y generar empleo genuino. “Esto no es un capricho: es la única manera de darle rentabilidad a nuestra producción, sustituir importaciones de combustibles y generar empleo genuino en el norte”, afirmó. Además, exigió seguridad jurídica y reglas claras: “No podemos seguir planificando con la incertidumbre de no saber cuál será nuestro cupo, cuál será el precio o qué decisión improvisada se tomará mañana”.
Respaldo de la UIA y un proyecto federal
El reclamo de Rocchia Ferro se alinea con la postura de la Unión Industrial Argentina (UIA), que, bajo la presidencia de Martín Rappallini y el secretario Eduardo Nougués, elevó una nota al Jefe de Gabinete, Guillermo Francos, solicitando que el Ejecutivo promueva el tratamiento urgente del Proyecto de Ley de Biocombustibles elaborado por la Liga de Provincias Bioenergéticas. Este proyecto, que ya cuenta con estado parlamentario en el Senado y Diputados, busca fortalecer la producción de bioetanol y biodiesel, fomentar la sostenibilidad energética y consolidar el desarrollo federal en provincias como Tucumán, Salta, Jujuy y otras.
La UIA destacó que el proyecto es fruto de “un arduo trabajo en búsqueda de acuerdos entre el sector público y privado” y subrayó sus beneficios: agregar valor a cultivos como la caña de azúcar, reducir importaciones de combustibles fósiles, generar empleo y diversificar la matriz energética. La iniciativa propone incrementar los cortes obligatorios de bioetanol y biodiesel, establecer un mercado libre para mezclas superiores y fomentar inversiones en biocombustibles para transporte aéreo, marítimo y fluvial, con licitaciones transparentes que reemplacen los cupos y precios fijados por el Estado.
Rocchia Ferro fue categórico al invocar el artículo 75, inciso 19 de la Constitución Nacional, que obliga al Congreso a “proveer al crecimiento armónico de la Nación y al poblamiento de su territorio” mediante políticas que equilibren el desarrollo de las provincias. “No estamos pidiendo privilegios, estamos exigiendo el cumplimiento de la Constitución”, afirmó, advirtiendo contra la repetición de la crisis de 1966, cuando “200.000 tucumanos emigraron y poblaron los cordones de miseria del Gran Buenos Aires”. “El norte argentino no quiere volver a ser proveedor de pobreza para el conurbano bonaerense”, sentenció.
La propuesta de la Liga Bioenergética, respaldada por la UIA y la UIT, busca actualizar el marco normativo vigente (Ley 27.640), considerado “agotado” por el sector. Entre sus medidas, plantea un aumento progresivo del corte de bioetanol al 15% en dos años y la creación de un mercado libre para mezclas superiores, lo que fortalecería la producción de Tucumán, líder en bioetanol de caña de azúcar. Estas medidas no solo impulsarían la economía regional, sino que también contribuirían a la soberanía energética y la reducción de emisiones.
El respaldo conjunto de la UIA, la UIT y la Liga de Gobernadores refleja la urgencia de una normativa que brinde previsibilidad y competitividad al sector. Rocchia Ferro cerró su mensaje con un compromiso claro: “El azúcar y el bioetanol son nuestra bandera de desarrollo. Y si el país nos da las condiciones necesarias, el norte no solo va a producir, sino que va a crecer, a educar y a darle dignidad a su gente”. Mientras el proyecto espera su debate en el Congreso, la presión del sector industrial y las provincias del NOA crece para evitar que la falta de acción condene a la región a una crisis económica y social sin precedentes.