CONMOCIÓN EN JUJUY POR UN FEMICIDIO
La Policía llegó cuando la víctima aún estaba con vida, pero se retiró sin intervenir
La familia de Daniela Mamani, una joven enfermera asesinada por su expareja, denuncia negligencia policial y exige que también se investigue a los agentes que acudieron al lugar.
El femicidio de Daniela Mamani volvió a sacudir a Jujuy y abrió un fuerte cuestionamiento al accionar policial. La autopsia confirmó que la joven estaba con vida cuando los efectivos llegaron al departamento tras un llamado al 911, pero aun así se retiraron sin ingresar, pese a las advertencias de los vecinos sobre los gritos de auxilio. La familia sostiene que esa intervención pudo haber cambiado el desenlace.
La secuencia comenzó el lunes 10 de noviembre, minutos después de las 23, cuando dos uniformados se presentaron en la vivienda donde vivía Daniela. Según relataron sus hermanas, Elizabeth y Gisela Mamani, los agentes tocaron la puerta, recibieron respuestas confusas desde el interior y, ante la ausencia del dueño del inquilinato, resolvieron retirarse sin intentar forzar la entrada ni permanecer en el lugar. Se marcharon a las 23:39. La autopsia reveló que Daniela murió entre la 1 y las 3 de la madrugada del martes, es decir, más de dos horas después de la llegada de la Policía.
“Si hubieran entrado, hoy mi hermana estaría viva”, lamentó una de ellas. El cuerpo recién fue hallado a las 7 de la mañana, cuando el propietario notó la puerta entreabierta e ingresó. Para la familia, la omisión policial fue determinante y merece ser investigada en profundidad.
El autor del crimen, Matías Manuel Tinte, expareja de la víctima, se presentó luego en una comisaría donde confesó: “Cometí un error”. La Justicia lo imputó por femicidio. Según el entorno de Daniela, la relación había durado diez años y ella había decidido terminarla cuatro meses antes. “Él no trabajaba, no estudiaba y no aceptó la separación”, explicó su hermana. Aunque no había denuncias recientes, existían antecedentes de violencia.
La familia reclama ahora la pena máxima para Tinte y una investigación amplia: “Pedimos que se investigue a los policías y al fiscal. No atendieron llamados, no entraron, se fueron como si nada”.
El caso vuelve a exponer fallas estructurales en la respuesta estatal ante situaciones de violencia de género. Daniela pidió ayuda. La Policía llegó a tiempo. Pero no actuó.
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