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ELECCIONES LEGISLATIVAS

Jaldo venció con claridad, pero la potencia de Milei le arrebató una banca

El gobernador puede jactarse de ser uno de los pocos peronistas en haber vencido al líder libertario. Las especulaciones por el tercer escaño perdido dentro del PJ.

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Fernando StanichTendencia de noticias
27 oct, 2025 12:35 a. m. Actualizado: 27 oct, 2025 12:41 a. m. AR
Jaldo venció con claridad, pero la potencia de Milei le arrebató una banca

Dos conclusiones pueden sacarse de la elección legislativa en Tucumán. Por un lado, que el gobernador Osvaldo Jaldo ganó con comodidad, pero no pudo despegarse por completo con miras a su reelección. Por el otro, que la oposición en Tucumán se quedó, formalmente, acéfala: el sillón de líder está vacante de cara a 2027.


El mandatario hizo una elección, en números, indiscutible. Casi 525.000 sufragios y 15 puntos de distancia con el segundo en un comicio para elegir diputados nacionales. Claro, para llegar a esa cifra debió asumir el riesgo de ponerse al frente de la campaña como candidato testimonial. En el camino, sufrió la negativa de la intendenta Rossana Chahla y del vicegobernador Miguel Acevedo, quienes rechazaron el convite.


En cualquier otra ocasión, esos números le hubiesen permitido al oficialismo quedarse con la mayoría de las bancas en disputa, sino todas. Por ejemplo, en 2005, el Frente para la Victoria obtuvo en Tucumán 382.000 votos y se llevó las cuatro bancas en disputa.


La explicación es simple: enfrente de Jaldo estuvo la potencia del presidente Javier Milei. La Libertad Avanza completó una elección inédita para la oposición en Tucumán. Los 363.807 votos que marcó anoche el escrutinio provisorio son números dignos de una compulsa por la gobernación: en 2015, el Acuerdo para el Bicentenario de José Cano-Domingo Amaya obtuvo 380.000 adhesiones; y la dupla Roberto Sánchez-Germán Alfaro alrededor de 371.000 votos.


Es decir, la figura de Milei hizo suyos los votos de las últimas experiencias aliancistas en la provincia. De esta manera, Tucumán sentará dos diputados nacionales por primera vez: Federico Pelli y Soledad Molinuevo. Sin embargo, hay un detalle: no hay una figura provincial a la que pueda traspolarse ese caudal de adhesiones. Son votos a Milei.


Así las cosas, la consecuencia inmediata es que la oposición tendrá que reconfigurarse para diseñar e instalar un candidato capaz de enfrentar al poderío del peronismo provincial. Claro, para eso será crucial el apoyo de la Casa Rosada. Lisandro Catalán, ministro del Interior y presidente de LLA en Tucumán, tendrá trabajo en ese sentido por los próximos dos años.


El gran perjudicado por la irrupción mileísta en este territorio fue, claramente, Roberto Sánchez. El radical se derrumbó electoralmente: sin apoyos, sin estructura y sin una campaña nítida, se fue desdibujando con el correr de las semanas. El concepcionense terminó con menos de 84.000 votos y apenas el 8% de las adhesiones.


Para el oficialismo, la derrota en Capital abrirá la temporada de especulaciones y pases de factura. LLA venció en territorio chahlista por apenas tres puntos: unos 12.000 votos. La paridad no evitará los señalamientos ni los recelos. En particular, porque en la última semana un sector del peronismo antijaldista comenzó una movida para contrarrestar el ansiado 3 a 1 que había presagiado Jaldo el 17 de octubre. Quienes militaron el 2 a 2 o el 2-1-1 fundamentaron su postura en la necesidad de mantener "sujetado" al gobernador. Ergo, evitar que pudiera atribuirse una victoria aplastante y avanzar en contra del peronismo que le resiste.


Por eso anoche en la Casa de Gobierno no había rostros exultantes. Jaldo venció con comodidad y se plantó como uno de los poquísimos gobernadores que puede jactarse de haber frenado el embate del León en su tierra. Esa cucarda, en la etapa de la Argentina que comenzará y con un Congreso que recibirá reformas polémicas para abordar, será un plus con el que contará. Claro, hay otro hecho para sopesar: el perfil de los diputados tucumanos a partir del 10 de diciembre.


Por el peronismo quedarían Gladys Medina y Javier Noguera. Como la bandeña tiene mandato vigente por dos años más, será Elia Fernández quien lo complete para que ella pueda asumir el nuevo período hasta 2029. A ellos se suman Pablo Yedlin y Carlos Cisneros. La luz de alerta para Jaldo es que pasará de tener tres diputados en su bloque Independencia (Medina, Fernández y el saliente Agustín Fernández) a sólo dos leales (Medina y Fernández). Por cuestiones ideológicas, es de prever que Noguera se sienta más cómodo votando junto a Yedlin y a Cisneros en contra de los proyectos que envíe la Casa Rosada. Claro, Noguera tendrá que surfear entre su intransigencia y los pedidos de Jaldo porque su esposa, Alejandra Rodríguez, aún debe gobernar Tafí Viejo hasta 2027. La experiencia reciente de su salida del Pacto Social es un antecedente elocuente.


Como se ve, la etapa que comienza hoy requerirá de la muñeca de Jaldo para dialogar con el Gobierno libertario sin perder el apoyo del peronismo antimileísta. Un equilibrio que exacerbará de manera recurrente las tensiones internas del PJ.

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