La derrota ante San Lorenzo y la decisión del plantel de Atlético Tucumán de no concentrar en la previa del partido generaron una tormenta institucional en el club. En medio de ese clima caliente, el presidente Mario Leito salió a hablar y explicó los motivos del conflicto, pidiendo calma y respaldo. “La situación económica general es muy mala, pero lo nuestro no es un problema económico, sino financiero”, sostuvo el dirigente, intentando marcar una diferencia clave en medio de la crisis.
Leito detalló que la institución atraviesa un momento de falta de liquidez, producto de ingresos trabados que el club no logra cobrar. “Tenemos créditos que no podemos hacer efectivos: todavía no pudimos cobrar la venta de Cuello en Brasil, tampoco el dinero que nos debe Independiente por el tema de los puntos, y hay algunos sponsors que no nos pudieron pagar. Todo eso nos generó un problema financiero, no económico”, explicó.
El presidente reconoció que el club mantiene una deuda con los jugadores, pero aclaró que se trata únicamente de premios y no de sueldos. “Debemos tres partidos: Talleres, River y Platense. Es cierto, los premios están pendientes, pero no es una suma grande. No se trata de sueldos, sino de incentivos”, puntualizó Leito, intentando bajar el tono de un conflicto que tomó repercusión nacional.
Sobre la decisión del plantel de no concentrar, el máximo dirigente del Decano dijo entender la postura de los futbolistas, aunque marcó distancia. “Yo no voy a quebrar ni a convencer a nadie. Respeto su decisión, pero ahora tenemos que pensar en Atlético. Tenemos que ponerle paños fríos a todo esto, volver a hablar con los jugadores y acompañarlos. Hoy se jugó en un clima muy difícil, pero hay que mantener la calma”, expresó.
El dirigente también pidió mesura al periodismo y defendió el rol de los medios, luego de que algunos integrantes del plantel apuntaran contra la prensa. “No me parece bien echar culpas. Hay que entender que venimos de perder un partido en un contexto complicado. Yo soy el responsable de todo esto y voy a hablar con los jugadores para calmar las cosas. Necesitamos recomponernos y cerrar el año de la mejor manera posible”, afirmó.
Consultado sobre las versiones de conflictos internos entre dirigentes y jugadores, Leito fue tajante. “Si alguien dice que hay futbolistas destratados por miembros de la comisión, que diga nombres. Si no, se genera un rumor que no ayuda. Si hay algo para decir, que se diga con claridad, pero tirar medias verdades no sirve. Necesitamos serenidad, no más ruido”, enfatizó.
Sobre el clima vivido en el Monumental José Fierro, donde la hinchada manifestó su descontento antes y durante el partido, Leito pidió comprensión. “A la gente le duelen muchas cosas, pero una palabra fuera de lugar puede encender una mecha que no nos sirve a nadie. El hincha espera respuestas dentro de la cancha, y eso lo entendemos”, dijo, visiblemente preocupado por el malestar generalizado.
A pesar del contexto adverso, el presidente intentó cerrar su discurso con un mensaje optimista. “Hay que tener paciencia. Estas cosas se van a arreglar. Los jugadores van a rendir como saben, vamos a ganar el próximo partido de local y vamos a conseguir la tranquilidad que necesitamos. Atlético Tucumán seguirá siendo el único equipo del norte argentino en Primera División”, concluyó Leito, buscando devolver algo de calma en una noche que dejó heridas abiertas y muchas preguntas por responder.
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