
En medio del conflicto entre la Asociación de Empresarios del Transporte Automotor de Tucumán (AETAT) y el gremio de UTA, que este jueves dejó a miles de tucumanos sin servicio de ómnibus, la Municipalidad de San Miguel de Tucumán recibió a representantes de la Federación de Organizaciones en Defensa de los Consumidores y Usuarios (FODECUS) para analizar el impacto de la medida y avanzar en acciones conjuntas que garanticen los derechos de los pasajeros.
El encuentro, realizado en la sede municipal de 9 de Julio y Lavalle, fue encabezado por la secretaria de Gobierno, Camila Giuliano, y el secretario de Movilidad Urbana, Benjamín Nieva, quienes dialogaron con el titular de FODECUS, José García. Durante la audiencia, las partes coincidieron en que las medidas adoptadas por el sector empresario, con la suspensión de personal y la amenaza con recortar recorridos, lo que derivó en el paro convocado por UTA, perjudican directamente a miles de usuarios que dependen del servicio de ómnibus.
“Por orden de la intendenta, la doctora Rosana Chahla, convocamos de inmediato a los representantes de FODECUS porque entendemos que los mayores perjudicados por este conflicto son los usuarios”, explicó Giuliano. “La situación del transporte público no puede seguir afectando a quienes necesitan el colectivo para ir a trabajar o estudiar. El municipio tiene como eje central al ciudadano y no puede ser rehén de disputas entre privados”, subrayó.
La funcionaria recordó que la Municipalidad viene realizando importantes inversiones para mejorar el sistema —como la instalación de GPS y cámaras en las unidades, mejoras en calles y paradas— y remarcó que “los empresarios también deben asumir su responsabilidad en la calidad del servicio que prestan”.
Durante la reunión, las partes coincidieron en fortalecer la participación ciudadana en la toma de decisiones del sistema de transporte. “Articulamos para que los representantes de FODECUS puedan ser miembros activos y defensores de los usuarios, vehiculizando reclamos y solicitudes”, señaló Giuliano.

Por su parte, José García, titular de FODECUS, destacó la predisposición del municipio, pero apuntó directamente contra los empresarios del sector. “Molesta que, casi a fin de año, los empresarios vuelvan a exigir subsidios y tarifas más altas, cuando no vemos voluntad de inversión ni mejoras en las unidades. El usuario paga por un servicio que cada vez funciona peor”, cuestionó.
El dirigente también reclamó que se incluya a los usuarios en la mesa de discusión del sistema. “Los grandes errores se cometen porque el usuario no está presente. No puede ser que sólo se sienten el gremio, los empresarios y el gobierno; da la casualidad de que ninguno de ellos viaja en colectivo. El usuario tiene muchas cosas para decir”, enfatizó.
Finalmente, Giuliano destacó que la voz de los usuarios será tenida en cuenta en las futuras decisiones sobre el sistema. “En este conflicto hablan los empresarios y los trabajadores, pero escuchar al usuario es fundamental. El municipio va a seguir priorizando al ciudadano”, concluyó.