Limpieza fuerte en San Martín: ocho jugadores locales no seguirán en el nuevo proyecto

San Martín atraviesa días de definiciones fuertes y el ciclo de Andrés Yllana ya empezó a marcar un antes y un después. La reestructuración del plantel avanzó con decisiones contundentes y una de las señales más claras es la salida de varios futbolistas nacidos en la provincia, un movimiento que no pasa inadvertido por cantidad, contexto y significado. Ocho apellidos, todos con raíces locales, quedaron fuera del proyecto deportivo que se está delineando.

La lista es extensa y diversa en situaciones. Mauro Osores, Agustín Prokop, Nicolás Carrizo y Tomás García no continuarán luego de que se resolviera no renovar sus vínculos. En estos casos, la evaluación fue deportiva y económica: jugadores jóvenes, con contratos que finalizan, poco rodaje en el último tiempo y salarios considerados altos en relación al mercado de la categoría. La dirigencia entendió que no tenía sentido sostener esos acuerdos y optó por cerrar el ciclo.

Distinto es el escenario de Jesús Soraire y Juan Orellana, quienes aún tenían contrato vigente. Sin embargo, Yllana ya dejó en claro que no los tendrá en cuenta. En ambos casos se inició un diálogo anticipado para buscar una salida consensuada, con el objetivo de no perjudicar a los futbolistas en la búsqueda de nuevos destinos. La decisión fue del cuerpo técnico y contó con el aval del director deportivo y de la conducción del club, que optaron por comunicarlo de inmediato.

Ulises Vera y Nicolás “Chuny” Moreno representan un capítulo aparte. A los dos se les ofreció seguir siendo parte del proyecto, pero las negociaciones no llegaron a buen puerto. San Martín acercó una propuesta para renovar, aunque desde el entorno de los jugadores se solicitó un monto superior al inicialmente acordado. Ante esa postura, el club decidió no estirar la negociación y ambos se marcharán en condición de libres. Vera ya cuenta con interés de Quilmes, mientras que Moreno es seguido por Tristán Suárez y San Miguel, con la particularidad de que ambos son representados por el mismo agente: Wilfredo Olivera, ex jugador que vistió la casaca "Ciruja" en 2023 y se fue mal del club.

Estos casos generan un impacto especial. Formados íntegramente en el club desde niños, tras pasar por todas las divisiones, sus salidas sin dejar rédito económico expone una de las preocupaciones internas: la pérdida de patrimonio. Desde la dirigencia explicaron que uno de los errores fue no haber cerrado la renovación antes de junio, lo que dejó a los jugadores en una situación contractual que derivó en su libertad de acción.

Puertas adentro, el mensaje es claro. Yllana “pasó la escoba” tras encontrarse con contratos elevados y una estructura que consideró desordenada. La idea es ajustar costos, achicar el plantel y rearmar con jugadores que encajen en su mirada futbolística y en la realidad económica del club. No todos los nombres locales se irán: hay excepciones, como el caso de Abregú, que seguirá siendo parte del equipo.