“Atlético Tucumán puede estar tranquilo: estamos ordenados”: la palabra del tesorero Martín García

Atlético atraviesa un momento de análisis profundo y planificación a futuro, y la voz de Martín García, tesorero del club, aporta claridad en medio de un contexto económico exigente. En una extensa entrevista, el dirigente repasó su recorrido en la institución, explicó el funcionamiento financiero actual y proyectó el camino que pretende consolidar a la entidad en los próximos años.

Un recorrido que comenzó desde la tribuna
García recordó que su llegada a la dirigencia se dio en 2013, tras ser convocado para integrar la lista que encabezaba Mario Leito. Socio de toda la vida, asumió un rol clave dentro de la comisión directiva, consciente de la responsabilidad que implica administrar recursos que no son propios. “Es un cargo muy sensible, con decisiones permanentes y una exigencia que no se detiene nunca”, explicó, al definir una función que va mucho más allá de los días de partido.

La gestión, un trabajo sin descanso
El tesorero describió el día a día como una tarea “24-7”, sin feriados ni vacaciones. Desde la organización de los encuentros hasta el armado de planteles, contratos, pretemporadas y logística para los futbolistas, la labor dirigencial no se detiene ni siquiera cuando los jugadores están de descanso. En ese contexto, recordó especialmente la pandemia, una etapa inédita y compleja en la que el club siguió funcionando pese a las restricciones y la incertidumbre general.

Pandemia y orden administrativo
García remarcó que el impacto del COVID fue durísimo, pero destacó que Atlético pudo afrontarlo gracias a una administración ordenada. “Nunca gastamos más de lo que ingresaba”, afirmó, y explicó que esa política permitió sostener sueldos, compromisos y funcionamiento institucional sin sobresaltos mayores, aun en un escenario extremo que puso a prueba a todas las organizaciones.

De los golpes a los sueños cumplidos
En el repaso emocional, recordó como uno de los momentos más duros la final perdida ante Huracán en Mendoza, apenas un año después de su llegada. Sin embargo, ese golpe fue el inicio de una etapa histórica: el ascenso, la clasificación a copas internacionales, los viajes por Sudamérica y la participación en la Libertadores. “Como dirigente y como hincha fue tocar el cielo con las manos”, sintetizó.

Superávit, finanzas y una explicación clave
Uno de los puntos centrales de la charla fue la diferencia entre problemas económicos y financieros. García aclaró que el superávit es una “foto” de un momento puntual del balance, mientras que los inconvenientes actuales se originan en ingresos previstos que no llegaron, como ventas de jugadores aún impagas. “No es que el dinero se perdió, es que no se cobró”, explicó, y aseguró que el club está realizando las gestiones legales correspondientes para regularizar esa situación.

La importancia de vender y formar
El dirigente fue contundente al señalar que, para clubes como Atlético, la venta de futbolistas es vital. Según detalló, entre el 42 y el 55% de los ingresos dependen de ese rubro. En ese sentido, defendió la inversión en el predio de San Andrés, al que definió como una “fábrica de jugadores”, fundamental para sostener el crecimiento deportivo y económico a largo plazo.

El futuro, con socios y objetivos claros
De cara a lo que viene, García pidió tranquilidad y acompañamiento al hincha, con un mensaje claro: asociarse es clave para proyectar. Aumentar la masa societaria permitirá mejorar presupuestos, potenciar obras y reforzar planteles. Con la mirada puesta en 2026 y en el cierre de la gestión en 2028, el tesorero imaginó un Atlético consolidado, con infraestructura en pleno funcionamiento y el anhelo intacto de volver a competir a nivel internacional, siempre guiado —según afirmó— por el amor al escudo.