El tercer paro de los controladores aéreos en menos de una semana volvió a paralizar la actividad en los principales aeropuertos del país. Según las compañías, de una operación prevista de 295 vuelos, más de 178 servicios se vieron afectados: 82 cancelados y 96 reprogramados, lo que dejó a más de 15.000 pasajeros sin poder concretar sus viajes.
La protesta, impulsada por la Asociación Técnicos y Empleados de Protección y Seguridad a la Aeronavegación (ATEPSA), se llevó adelante en dos franjas horarias: de 7 a 10 y de 14 a 17 horas. La medida no solo complicó los despegues, sino que también generó demoras en los arribos y alteraciones en la operación del resto de la jornada.
En el Aeropuerto Benjamín Matienzo de Tucumán, los vuelos también sufrieron la medida de fuerza. Fueron cancelados los servicios de Aerolíneas Argentinas hacia Aeroparque y Ezeiza, además de reprogramaciones en las compañías Flybondi y JetSmart. El impacto se sintió con fuerza, dejando varados a cientos de pasajeros que debieron rearmar sus planes.
El sindicato ya anunció que el plan de lucha continuará durante la semana, con nuevas jornadas de paro previstas para el jueves y el sábado. Mientras tanto, las aerolíneas recomendaron a los usuarios chequear el estado de sus vuelos antes de trasladarse a los aeropuertos, a fin de evitar mayores inconvenientes.