
La Selección Argentina Sub-17 comenzó su camino mundialista en Qatar con una actuación cargada de emoción y coraje. En su presentación en el Aspire Zone de Rayán, el conjunto dirigido por Diego Placente venció 3-2 a Bélgica luego de un partido repleto de giros. Ramiro Tulián abrió la cuenta en la primera mitad, pero el conjunto europeo dio vuelta el marcador antes de que los juveniles argentinos sacaran a relucir su temple para conseguir una remontada memorable.
El equipo nacional se adelantó con el tanto del mediocampista de Belgrano, quien capitalizó una buena jugada colectiva por la banda izquierda. Sin embargo, los belgas respondieron rápidamente: Arthur de Kimpe igualó el marcador cerca del descanso y Stan Naert puso el 2-1 en el complemento. Parecía que la historia se torcía para la Albiceleste, pero el ingreso de aire fresco en ataque cambió el rumbo del encuentro.

A los 68 minutos, Facundo Jainikoski, una de las figuras del equipo y jugador de Argentinos Juniors, culminó una gran maniobra colectiva para establecer el empate. Apenas tres minutos después, fue el propio Jainikoski quien asistió a Felipe Esquivel, de River, para que con un potente disparo alto sellara el 3-2 definitivo. En una ráfaga, el conjunto argentino transformó la desventaja en euforia y dio un golpe anímico en su estreno mundialista.
Con este resultado, Argentina comparte la cima del Grupo C junto a Túnez, que superó ampliamente a Fiyi. Los dirigidos por Placente volverán a presentarse el jueves ante el combinado africano, mientras que cerrarán la fase de grupos frente a los oceánicos el próximo domingo. Una primera muestra de carácter para un plantel que sueña con hacer historia en Medio Oriente.

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