Jazmín Ortenzi avanza a paso firme en el Tucumán Open: "Lo fundamental es que estoy disfrutando"

Aunque el ranking indica que es la cuarta mejor ubicada entre las tenistas argentinas, Jazmín Ortenzi atraviesa un gran presente. La riojana, que en las últimas semanas logró su primer título W50 y alcanzó por primera vez las semifinales de un WTA 125, ya está en cuartos de final del Tucumán Open: consiguió la clasificación tras un contundente 6-0 6-3 sobre la georgiana Ekaterine Gorgodze (191°).

217° del mundo -y subiendo-, posición que marca su mejor ranking histórico, "Jaz" respaldó su gran actuación en primera ronda sobre Candela Vázquez (6-0 6-2) ante una rival de mucha mayor jerarquía y experiencia.

Ya desde el comienzo, la riojana impuso condiciones, atacando con su revés cada vez que tuvo la oportunidad, y errando muy poco. Gorgodze, víctima de la impotencia, se mostró desbordada emocionalmente. Ese combo fue letal, y Ortenzi se llevó el parcial por 6-0 en apenas 23 minutos.

Con un quiebre de entrada en el segundo set, todo parecía encaminarse a terminar rápidamente a favor de la argentina. Por momentos, en algunos games, la georgiana mostró toda su calidad, con tiros muy potentes tanto de drive como de revés, y bajó la cantidad de errores. Ortenzi se mantuvo firme, volvió a quebrar y sacó 5-2 para partido; sin embargo, Gorgodze logró quebrar el saque de su rival. Aunque la alegría le duró poco: Jazmín quebró en el game siguiente y cerró el set por 6-3, para llevarse el triunfo y la ovación de los presentes.

"Sentí que fue un partido mucho más duro, me esperaba un resultado mucho más apretado. Siempre pensando que podía ser para mí, pero no me imaginaba un resultado así. Estoy muy contenta por mantenerme y seguir una vez que encontré mi juego. Me sorprendí", reconoció Ortenzi, sobre el abultado marcador que consiguió.

La riojana aseguró que la diferencia clave fue la solidez. "Ella tuvo más errores. Siento que le aguanté bien los primeros tiros, que empezaba tirando, y después cuando se acomodaba el punto pude jugar bien, hacer muy juego. Estuve muy cómoda en ese sentido", subrayó.

La nacida en Chilecito explicó cómo mantuvo el foco más allá de las acciones particulares de su rival, que durante varios tramos se mostró ofuscada con sí misma y con su entrenador, vociferó en voz alta y hasta sacó de abajo una vez. "La he cruzado varias veces en otros torneos, y sabía lo que podía llegar a hacer adentro de la cancha. Mi cabeza estaba en seguir luchando igual, no engancharme en nada en ningún momento. No le presté atención a esas cosas", analizó.

Por otra parte, remarcó que explica su presente, en parte, por el disfrute que siente en cancha. "Es lo fundamental. Siento que disfrutando estoy resolviendo las situaciones de los partidos, estoy contenta dentro de la cancha, y estoy predispuesta a hacer lo que sea para incomodar un poco a la otra, correr las pelotas, estar alentándome y estar positiva. Son cosas que le molestan a la rival y hoy lo sentí así, traté de estar prendida todo el tiempo, que no me vea mal. Es lo que vengo haciendo durante todos los partidos, tratando de disfrutar y llevar todo lo que hago en los entrenamientos a los partidos".

Para cerrar, destacó el acompañamiento de su madre. "Hace cuatro meses que no la veía, entre mis giras, mi entrenamiento y su trabajo. Por suerte este torneo en Tucumán habilita a que venga a acompañarme, porque estamos más cerca que de Buenos Aires. Muy contenta".

Su rival en cuartos de final será la griega Despina Papamichail, que en un partido de casi tres horras derrotó 6-4, 5-7 y 6-2 a la australiana Tina Smith.