
A días de que comiencen los cruces decisivos del Clausura y en medio de un clima cargado por las críticas al VAR y a los jueces, Claudio “Chiqui” Tapia decidió sentar postura. El presidente de la AFA, invitado a un encuentro organizado por Olé, habló abiertamente sobre el desgaste que atraviesa el arbitraje argentino y el modo en que cada fin de semana se multiplican las sospechas alrededor de determinadas decisiones.
Tapia apuntó a lo que considera una mirada desbalanceada dentro del ecosistema del fútbol. Señaló que, en el análisis cotidiano, se le atribuye demasiado peso a los errores arbitrales y muy poco a las fallas propias de los equipos. “Los protagonistas también se equivocan”, remarcó, y agregó que muchas veces se instala la idea de que un mal resultado depende únicamente de un fallo del referí. Para el dirigente, esa lectura parcial se alimenta desde afuera y termina condicionando al público.

El titular de la AFA también respondió a las versiones que sugieren favoritismos hacia algunos clubes, especialmente Barracas Central y Deportivo Riestra. Lejos de esquivar el tema, sostuvo que este tipo de teorías “existen desde siempre” y recordó que incluso durante la gestión de Julio Grondona se repetían comentarios similares. Tapia puso como ejemplo rachas extensas sin derrotas o descensos imprevistos para demostrar, según él, que las suspicacias no se condicen con la realidad deportiva.
En el tramo final, Tapia reconoció que los errores existen, pero insistió en que se trata de fallas propias de un deporte que se decide “en fracciones de segundo”. Aseguró que la AFA trabaja para mejorar la preparación y profesionalización de los árbitros, aunque pidió que el debate contemple a todos los actores del juego. Para él, el foco no debería quedar únicamente sobre el juez: “Cuando un equipo pierde es porque el rival lo supera”, sentenció.
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