El macabro hallazgo de los cuerpos de Lara Gutiérrez (15), Brenda del Castillo (20) y Morena Verdi (20) conmociona al país. Las jóvenes fueron vistas por última vez cuando se dirigían a una supuesta fiesta en el Bajo Flores, pero terminaron en una casa de Villa Vatteone, donde fueron brutalmente asesinadas. Tras cinco días de búsqueda, sus restos fueron encontrados enterrados y descuartizados.
Por el caso hay seis detenidos, entre ellos Magalí Celeste González Guerrero (28), Andrés Maximiliano Parra (18), Iara Daniela Ibarra (19) y Miguel Ángel Villanueva Silva (27), ya trasladados al penal de Melchor Romero. En las últimas horas también fueron capturados Víctor Sotacuro Lázaro, localizado en Bolivia y expulsado al país, y Ariel Giménez, señalado como quien cavó la fosa donde enterraron a las víctimas.
Mientras tanto, la investigación apunta a Tony Janzen Valverde Victoriano, alias “Pequeño J”, un joven narco peruano de 23 años que permanece prófugo. Según la hipótesis judicial, habría ordenado los homicidios tras un robo de dinero y cocaína. En un allanamiento en La Matanza, la Policía halló un pantalón con manchas de sangre y una pistola Glock calibre .40, que serán peritados en los próximos días.
El caso está en manos del fiscal de Homicidios de La Matanza, Adrián Arribas, quien ordenó nuevas indagatorias y pericias sobre los objetos secuestrados. El ministro de Seguridad bonaerense, Javier Alonso, confirmó que además de “Pequeño J” y su ladero, Miguel Ozorio, todavía hay cuatro prófugos en la causa. La familia de las víctimas exige justicia, y en medio del dolor, el padre de Brenda advirtió: “No lo va a encontrar la Policía ni la Justicia, lo voy a encontrar yo”.