Un grave caso de caza furtiva generó indignación en la provincia luego de que se difundieran imágenes de un hombre posando con los cuerpos de siete corzuelas hembras, una especie protegida por ley y en peligro de extinción. El sujeto fue identificado como Adrián Barrionuevo, oriundo de Tafí Viejo.
En la fotografía, ampliamente compartida en redes sociales, Barrionuevo aparece armado junto a los animales muertos, presuntamente abatidos durante la noche mediante el uso de miras telescópicas, reflectores y desde una camioneta. Estas prácticas están expresamente prohibidas por la legislación argentina.
La caza de corzuelas y otras especies de la fauna silvestre está penada por la Ley Nacional N.º 22.421 y por la Ley Provincial N.º 6.292, que regulan la conservación de la biodiversidad y prohíben el uso de métodos como la caza nocturna, reflectores y armas de guerra.
La investigación, según pudo saber Tendencia de Noticias, comenzó a partir de una denuncia ciudadana recibida por WhatsApp. Gracias a ese aviso, la Dirección General de Delitos Rurales y Ambientales realizó un allanamiento con resultado positivo: se secuestraron armas de fuego, municiones, reflectores y otros elementos utilizados para la caza ilegal. También fue aprehendida Jessica Barrionuevo por atentado y resistencia a la autoridad.
El legislador provincial Gerónimo Vargas Aignasse fue uno de los primeros en hacer público el caso a través de sus redes sociales. En su posteo, repudió el accionar del cazador y destacó el trabajo de las fuerzas de seguridad en la investigación. Además, durante toda la jornada del domingo, se difundió un spot informativo que refuerza la gravedad de estos delitos ambientales y la importancia de su sanción efectiva.
Organizaciones ambientalistas y usuarios de redes sociales también manifestaron su rechazo, reclamando que se apliquen sanciones ejemplares y que se refuercen los controles para prevenir estos hechos, que constituyen una amenaza directa al equilibrio del ecosistema.
Desde las autoridades provinciales ya se dio intervención al área de Flora y Fauna, y el caso podría derivar en causas penales y administrativas. La protección de la biodiversidad exige un compromiso real y sostenido de todos los sectores de la sociedad.