La actividad física es una de las principales herramientas para cuidar la salud, pero en los últimos años el deporte, tanto profesional como amateur, se ha visto afectado por el uso de sustancias destinadas a “mejorar el rendimiento” o “acelerar los resultados”. Estas prácticas, según advierten los especialistas, pueden provocar severos efectos secundarios.
El documento presentado por la FAC busca informar y concientizar a deportistas, entrenadores y a la comunidad en general. “La suplementación deportiva es una medicación, requiere de una indicación precisa y un conocimiento de efectos beneficiosos y otros que pueden complicar la salud. En la gran mayoría de los usuarios genera un efecto placebo que hasta puede ser peligroso y económicamente caro”, explicó el Dr. Alejandro Vilchez (MP 112167), cardiólogo integrante de la institución.
Además, la Dra. Paola Courtade (MP 7165) recordó que la Organización Mundial de la Salud (OMS) ya considera a las bebidas energéticas como un problema de salud pública, especialmente en adolescentes y más aún cuando son combinadas con alcohol. Esta advertencia se suma al llamado a un uso responsable y supervisado de cualquier suplemento.
La Federación Argentina de Cardiología puso a disposición el documento completo elaborado por el Comité de Cardiología del Ejercicio, con el objetivo de abrir el debate y reforzar la prevención en torno a estas prácticas que ponen en riesgo la vida.