
El Instituto Nacional de Estadística y Censos (INDEC) publicó el "Resumen ejecutivo del primer semestre de 2025" de los "Indicadores de condiciones de vida de los hogares en 31 aglomerados urbanos". Este informe, basado en la Encuesta Permanente de Hogares (EPH), cuyo objetivo es "caracterizar a la población en términos de su inserción socioeconómica", analizó las condiciones de vida de 29,9 millones de personas y 10,1 millones de hogares en dicho semestre.
Una de las conclusiones centrales del relevamiento sobre los 31 aglomerados urbanos es la falta de acceso integral a los servicios esenciales. El documento señala que el "46,2% de los hogares, en los que habita el 51,6% de las personas, no accede a al menos uno de los servicios considerados" (agua corriente, cloacas y gas natural). En contrapartida, el 53,8% de los hogares (48,4% de las personas) sí accede a los tres servicios.

Desagregando los servicios, el "90,6% de los hogares" cuenta con acceso a la red de agua corriente, dejando al "9,4% de los hogares" sin este acceso. Respecto al gas de red, la cobertura es significativamente menor: "el 65,7% accede a la red de gas natural", implicando que "el 34,3% no dispone de gas de red". En cuanto a las redes de desagües cloacales, el 73,1% de los hogares accede a ellas.
En referencia a las características del hábitat, el informe detalló que el 5,1% de los hogares (5,9% de las personas) vive "cerca de basurales" (a tres cuadras o menos). Asimismo, el 9,0% de los hogares, que involucra al "10,7% de las personas, habita en zonas inundables".
Calidad habitacional y saneamiento
En lo referente a las características habitacionales, la calidad de los materiales de la vivienda mostró resultados generalmente "Suficientes" para la mayoría de los residentes: el "81,5% de los hogares y el 78,0% de las personas habitan en viviendas cuyos materiales poseen calidad suficiente". Sin embargo, el 5,7% de los hogares presenta calidad insuficiente.

Respecto al hacinamiento crítico (más de tres personas por cuarto), este afecta al "1,8% de los hogares, lo cual involucra al 3,4% de las personas". La gran mayoría, el "98,2% de los hogares", habita en condiciones que "no reflejan hacinamiento crítico".
En cuanto al saneamiento, el "87,9% de los hogares" dispone de condiciones adecuadas. No obstante, el estudio puntualiza que el "6,1% de los hogares no posee baño con descarga de agua", una situación crítica que afecta al "7,6% de las personas".
Cobertura médica y tenencia
El análisis de la cobertura médica reveló que el "66,5% de las personas cuenta con obra social, prepaga, mutual o servicio de emergencia". El restante "33,3% solo posee cobertura médica a través del sistema público", lo que equivale a 9.966.000 personas.
Existen diferencias notables por edad: el 43,7% de los niños, niñas y adolescentes (hasta 17 años) solo está cubierto por el sistema público, mientras que este porcentaje desciende al "2,5% en el grupo de adultos mayores (65 años y más)".

En el régimen de tenencia de la vivienda, la mayoría son propietarios: el "61,1% de los hogares son propietarios de la vivienda y del terreno". Los inquilinos/arrendatarios representan el "20,7% de los hogares".
Indicadores educativos
La asistencia escolar entre niños, niñas y adolescentes (4 a 17 años) se mantiene alta: el "97,9% de la población de entre 4 y 17 años asiste a un establecimiento educativo formal". La inasistencia es mayor entre los niños de 4 años, alcanzando el 7,4%. La asistencia más elevada se observa en hogares con clima educativo (CE) medio, alto y muy alto, con porcentajes que varían entre "98,4%, 98,6% y 98,7%, respectivamente".
En la población de 18 a 24 años, "el 50,4% asiste a un establecimiento educativo y la mayoría se encuentra cursando el nivel de educación superior/universitario (81,5%)". De quienes no asisten, el "59,2% cuenta con el nivel secundario completo".

Para la población de 25 años y más, el informe destaca las brechas generacionales en la finalización de la educación secundaria: el 24,4% del grupo de 25 a 29 años no finalizó ese nivel, porcentaje que se eleva al "53,3% si se considera la población de 65 años y más".
Carencias estructurales
El informe incluye una caracterización según la condición de pobreza por ingresos (pobres indigentes 6,9%; pobres no indigentes 24,7%; no pobres 68,4%). Los datos revelan cómo la pobreza exacerba las carencias en todos los ejes analizados.
En la calidad de materiales, el 85,3% de los no pobres habita en viviendas con materiales suficientes, un valor que desciende drásticamente al "56,4% en el de las personas pobres indigentes".
La disparidad es más marcada en el acceso a servicios:
Gas de red: Accede el 70,9% de los no pobres, pero solo el "35,4% de las personas pobres indigentes".
Acceso a los tres servicios (agua, gas, cloacas): El 57,2% de los no pobres cuenta con el servicio triple, frente a solo el "27,9% de los pobres indigentes".
Vivienda en zonas inundables: "18,6% de los pobres indigentes" habita en zonas inundables, en contraste con el 7,4% de la población no pobre.

Finalmente, el clima educativo del hogar se concentra en los niveles más bajos entre la población pobre: los pobres indigentes y pobres no indigentes presentan la mayor representación en el nivel bajo (52,1% y 47,1% respectivamente), mientras que los no pobres tienen los niveles "alto (17,2%) y muy alto (14,3%) más elevados".