Beatriz Ávila: “Voy a acompañar este Presupuesto porque significa gobernabilidad para la Nación”

La senadora nacional por Tucumán, Beatriz Ávila (bloque Independencia), anticipó este jueves su voto a favor del proyecto de Presupuesto 2026 impulsado por el gobierno del presidente Javier Milei, al considerar que la iniciativa “da previsibilidad”, permite cumplir con el mandato constitucional y evita que el país continúe “sin una hoja de ruta clara”.

Durante su exposición en el recinto, Ávila, quien responde al gobernador Osvaldo Jaldo, hoy aliado estratégico de la Casa Rosada, celebró que el Congreso vuelva a debatir una ley de Presupuesto tras dos años sin esa herramienta.

“Después de mucho tiempo estamos cumpliendo con el mandato constitucional que está reflejado en el artículo 75. Este es el primer presupuesto que analizamos de esta gestión que asumió en diciembre de 2023”, afirmó, y remarcó la importancia de “escuchar todas las voces” en el debate parlamentario.

La senadora sostuvo que el proyecto “no es un trámite administrativo”, sino “un acto profundamente político”, porque define “el Estado que queremos y a quiénes queremos defender y proteger en este contexto económico de crisis muy frágil”. Si bien admitió que “no es el ideal”, consideró que el Presupuesto 2026 “da previsibilidad y es una herramienta para salir de un círculo vicioso de improvisación, crisis y desigualdad”.

En ese marco, Ávila respaldó el equilibrio fiscal y el superávit financiero previstos en la iniciativa, aunque advirtió que “el equilibrio fiscal no puede transformarse en un dogma”. “Sin estabilidad económica no hay justicia social, pero la macroeconomía tiene que acompañar al desarrollo productivo. El superávit fiscal no es un fin en sí mismo, tiene que ser un medio para llegar al crecimiento y al desarrollo de la Argentina”, subrayó.

Al referirse a la realidad de Tucumán y del norte argentino, la legisladora tucumana reclamó un federalismo real, con inversiones que corrijan asimetrías históricas. “Represento a una provincia que forma parte del NOA y que carga con brechas en infraestructura, logística, conectividad y financiamiento. Tucumán no tiene petróleo ni litio, no recibe regalías, pero tiene un enorme potencial”, señaló.

En ese sentido, enumeró el perfil productivo tucumano —energía, bioetanol, azúcar, citrus, ciencia, turismo, tecnología e industria del conocimiento— y destacó que la provincia “se ha hecho cargo de obras que la Nación ha abandonado”, manteniendo el equilibrio fiscal. Mencionó, entre otras, la continuidad del Procrear con 1.600 viviendas en Manantial Sur, la finalización de la cárcel de Benjamín Paz, el sostenimiento del incentivo docente, el subsidio al transporte y el inicio de obras en el aeropuerto Benjamín Matienzo.

“Si no tenemos rutas en buen estado, energía sustentable e incentivos a la producción, el federalismo queda en una letra vacía”, advirtió, al reclamar inversiones en infraestructura vial y ferroviaria y el mantenimiento de rutas clave como la 9, 34, 38 y 40, además del apoyo a las economías regionales y a los centros de investigación.

Ávila aclaró que acompañar el Presupuesto “no es dar un cheque en blanco”, pero cuestionó la alternativa de rechazarlo. “¿Cuál es la otra opción? ¿No aprobarlo y quedarnos por tercer año consecutivo sin presupuesto nacional?”, planteó. A su entender, la ley “afirma la misión esencial del Estado, que es garantizar derechos, desarrollar infraestructura y proteger a los sectores más vulnerables”.

“No pertenezco al partido político que gobierna la Nación, pero aprobar este presupuesto significa elegir la planificación sobre la improvisación, la transparencia sobre la opacidad y el desarrollo sobre el estancamiento”, concluyó. Finalmente, reiteró su postura: “Voy a acompañar este presupuesto porque significa gobernabilidad para la Nación, pero también para las provincias y los municipios”.