
El flamante entrenador de la Reserva de Atlético Tucumán, Ramiro González, brindó su primera entrevista radial tras asumir el cargo y lo hizo en el programa El Deportivo 12, donde dejó en claro cuáles serán los pilares de su trabajo: identidad, formación, competitividad y una fuerte articulación con el plantel profesional. Con experiencia reciente en el fútbol asiático, el DT se mostró ilusionado por el desafío y comprometido con el proyecto integral del club.
Una idea común para todo Atlético
González remarcó que su tarea estará alineada con la línea de trabajo del cuerpo técnico de Primera División que encabeza Hugo Colace, priorizando valores y una identidad que represente al club en todas sus categorías. “Más allá de los nombres, lo importante es sostener una misma idea como institución”, señaló, aclarando que si bien no habrá equipos idénticos, sí existirá una base conceptual compartida que permita potenciar el crecimiento de los futbolistas.
En ese sentido, destacó el muy buen 2025 que tuvo la Reserva y reconoció que la vara quedó alta. “El desafío es sostener y elevar ese nivel de profesionalismo, formando un equipo competitivo”, explicó, con el objetivo de preparar a los juveniles para el salto definitivo.
La coordinación con Primera, clave del proceso
Uno de los ejes centrales de la charla fue la convivencia entre Reserva y Primera División, especialmente ante la presencia de jóvenes que ya entrenan con el plantel superior. González fue claro: cada situación se analizará de manera individual, priorizando siempre lo mejor para el jugador. “No hay mejor entrenamiento que jugar y competir. La Reserva es una pata fundamental del proceso formativo”, afirmó.
El DT sostuvo que lo ideal sería que los juveniles no tengan que volver nunca a Reserva, porque eso significaría que ya se consolidaron arriba. Sin embargo, reconoció que el campeonato de Primera es muy exigente y que, en determinados momentos, sumar minutos en Reserva puede ser clave para no frenar el desarrollo.

Un grupo nuevo y el desafío de construir
González contó que se encontró con un plantel joven, predispuesto y con muchas ganas de aprender. Las primeras prácticas incluyeron trabajos en doble turno y, según el entrenador, la respuesta fue muy positiva. “Es un grupo prácticamente nuevo, que va a requerir tiempo, pero que tiene un incentivo enorme: ver a compañeros de camadas anteriores entrenando con Primera”, explicó.
El objetivo inmediato será sentar bases sólidas para que estos chicos puedan proyectarse como futuros futbolistas del club, entendiendo que el proceso formativo también debe tener un fuerte componente competitivo.
El regreso al país y la elección de Tucumán
Tras cinco años de trabajo en Asia, especialmente en Malasia, donde integró cuerpos técnicos de clubes que disputaron la Champions League del continente y lograron títulos, González explicó qué lo motivó a volver. “Me sedujo que hay un norte claro, una idea de trabajo y bases bien sentadas en Reserva. Atlético es un club grande del interior y yo soy del interior, sé lo que eso significa”, expresó.
Además, valoró la posibilidad personal y profesional de regresar a la Argentina con un proyecto serio, al que asumió “con ilusión, compromiso y responsabilidad”.

Experiencia internacional y mensaje final
Durante la entrevista también recordó su paso por el exterior y el contacto con futbolistas argentinos de renombre, como Luis “Lucho” Figueroa, a quien destacó como una pieza clave en la construcción de la cultura de club en Malasia (Johor FC).
En el cierre, González agradeció la bienvenida y dejó un mensaje claro para el mundo Atlético: “No hay fórmulas mágicas. Esto es trabajo, dedicación, compromiso y pasión. Si estamos todos juntos, todo se hace más fácil”. Con ese mensaje, el nuevo DT de la Reserva comenzó oficialmente su camino en el Decano.
#RESERVA
#ATLETICO
#TUCUMAN
#GONZALEZ
#DECANO
#PRESENTACION
#DOCTOR