Cómo funcionará el nuevo Sutrapa, que unificará el servicio de taxis y autos de plataformas en la Capital

El Concejo Deliberante de San Miguel de Tucumán emitió un dictamen y se prepara para votar este jueves la ordenanza que crea el nuevo Sistema Único de Transporte de Pasajeros en Automóvil (SUTRAPA), un marco integral que unifica las normas para taxis y para los autos privados que operan mediante aplicaciones digitales.

El proyecto, surgido del consenso entre los distintos bloques políticos tras varias semanas de discusiones y negociación, que redefine reglas, responsabilidades y sanciones, busca ordenar un sector que en los últimos años viene atravesando fuertes tensiones por el avance de plataformas como Uber, DiDi o Cabify.

A diferencia del mecanismo que regía por la anterior ordenanza (SUTRAPPA), que quedará derogada, el nuevo SUTRAPA establecerá la vigencia de dos regímenes diferenciados: por un lado, el servicio público de taxis, que mantendrá la posibilidad de levantar pasajeros en la vía pública y conservará una tarifa regulad; y por otro, el transporte privado de autos a través de plataformas, que quedará restringido exclusivamente a viajes solicitados previamente mediante la aplicación y con una tarifa definida por la ley de la oferta y la demanda.

Un modelo mixto y estrictamente regulado

 

Entre los objetivos centrales, el sistema apunta a mejorar la seguridad, garantizar reglas claras, promover la competencia leal y equilibrar la convivencia entre modalidades. El texto establece requisitos comunes para todos los conductores: licencia profesional, seguro obligatorio, documentación al día, vehículos en condiciones seguras e inspecciones periódicas. También se fijan prohibiciones estrictas, como trabajar sin habilitación, manipular dispositivos de medición o prestar servicio en condiciones de riesgo o alteración psicofísica.

La ordenanza otorga a la Municipalidad amplias facultades de fiscalización, incluyendo la posibilidad de solicitar información a plataformas, realizar inspecciones y aplicar sanciones que van desde multas y suspensiones hasta la caducidad de licencias. También se habilita el retiro preventivo de vehículos en casos graves, como falta de seguro o prestación sin habilitación.

Taxis: licencias por 10 años, sorteo y controles más exigentes

El Servicio de Taxis queda reafirmado como servicio público municipal y se establece una relación de “una licencia cada 100 habitantes”, más un cupo adicional de 20 para personas con movilidad reducida. Las nuevas licencias, en caso de existir vacantes, deberán adjudicarse por sorteo público entre quienes cumplan los requisitos, según aclara el proyecto.

Los taxis deberán contar con taxímetro —mecánico, electrónico o basado en app autorizada— sistemas de trazabilidad, GPS y comprobante digital. El conductor tendrá obligaciones específicas: prestar servicio cuando esté libre, usar el recorrido más corto o el indicado por el pasajero, asistir a personas con movilidad reducida y exhibir credencial habilitante.

Además, se crea el Registro de Conductores de Taxis, y se establecen responsabilidades para las agencias, que deberán mantener registros, supervisar la higiene de las unidades y colaborar con la fiscalización municipal.

Plataformas: inscripción obligatoria y viajes solo con pedido previo

En el caso de las aplicaciones, el proyecto de ordenanza las reconoce como actividad privada de interés público, pero bajo un régimen propio y con límites precisos. Para operar en la ciudad, las empresas deberán inscribirse en un registro municipal y presentar datos sobre su funcionamiento, sistemas de geolocalización, seguridad y protocolos de respuesta al usuario.

La norma prohíbe a los autos Uber la captación de pasajeros en la vía pública, por lo que todo viaje deberá iniciarse exclusivamente mediante una solicitud previa hecha desde la aplicación.

Las plataformas tendrán la obligación de enviar periódicamente al municipio el listado completo de conductores habilitados, con datos personales, documentación y seguro vigente. También deberán registrar digitalmente cada viaje, informar previamente el costo y facilitar mecanismos de emergencia.

Con la premisa de reordenar un sector clave, en un contexto de expansión de las aplicaciones y demandas de mayor control por parte del sector del taxi, la normativa consensuada por los concejales capitalinos fija reglas más claras, establece la necesidad de reforzar los mecanismos de control y crea un marco legal acorde a los nuevos modelos tecnológicos de transporte.

Una vez aprobada la ordenanza, la Municipalidad deberá avanzar en la reglamentación y en la puesta en marcha gradual de los nuevos registros, sistemas de fiscalización e instancias de control previstas. En este sentido, el Concejo Deliberante deja en manos de la intendenta Rossana Chahla la definición de algunos aspectos medulares del servicio de transporte en automóviles.