
La Selección femenina de handball, más conocida como "La Garra", concluyó este lunes su participación en el Mundial de Alemania y Países Bajos. Y lo hizo con una sonrisa: venció 30-29 a Túnez con un gol sobre la hora.
Por tercera edición consecutiva, el combinado "albiceleste" logró la clasificación a la segunda ronda, tras terminar en el tercer lugar del grupo E: allí logró un triunfo (27-14 sobre Egipto) y cosechó dos derrotas (25-32 ante Países Bajos y 23-27 ante Austria).
En la Main Round, el equipo dirigido por Mariano Muñoz mostró pasajes de alto nivel, y por momentos jugó de igual a igual ante seleccionados europeos. Sin embargo, otra vez, sufrió dos derrotas (25-28 ante Polonia y 17-29 ante Francia) que lo dejaron sin chances de avanzar.
Sabiendo ya de su eliminación -llegar a cuartos era casi una utopía ya en la previa-, La Garra buscó cerrar el torneo con una sonrisa. Y lo hizo ante Túnez, no sin antes sufrir bastante.
Con la conducción de su figura y goleadora, Elke Karsten, el seleccionado nacional tuvo un primer tiempo de muy alto nivel ante el combinado africano, que le permitió irse al descanso 17-10 arriba. Sin embargo, Túnez reaccionó en la segunda mitad, y tras recortar la distancia, logró no solo empatar el partido, sino ponerse dos goles arriba a falta de pocos minutos.
Afortunadamente, Argentina tuvo una embestida final clave para recuperarse. Y a falta de tres segundos, la pivot Giuliana Gavilán recibió frente al arco, giró y anotó para sellar el 30-29 definitivo, y permitirle a La Garra despedirse del Mundial con una sonrisa.
Con este triunfo, Argentina cerró el Mundial en el 22° puesto. Aunque no pudo mejorar sus últimas actuaciones -había sido 20° en 2023 y 21° en 2021-, el equipo de Muñoz volvió a evidenciar un crecimiento en su nivel pese a las desventajas con respecto a los seleccionados europeos, y se afianza como uno de los mejores seleccionados sudamericanos.
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