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ESCÁNDALO EN EL SUR

“Lo sucedido en Alberdi no es un hecho aislado, sino un síntoma del avance del narcotráfico”, advirtió la Iglesia

Desde la Pastoral Social de la Diócesis de Concepción expresaron preocupación por el escándalo que reveló nexos entre la política y el narcotráfico en el sur tucumano. “Esta oscura realidad se infiltra en nuestras instituciones”, alertó monseñor José Antonio Díaz.

Por Tendencia de noticias

13 jun, 2025 10:27 p.m. Actualizado: 13 jun, 2025 10:27 p.m. AR
“Lo sucedido en Alberdi no es un hecho aislado, sino un síntoma del avance del narcotráfico”, advirtió la Iglesia

El escándalo que derivó en la intervención del Municipio de Juan Bautista Alberdi, tras la viralización de un audio en el cual salieron a la luz supuestos nexos entre el depuesto intendente Luis “Pato” Campos y otros funcionarios con la venta de drogas, encendió las luces de alarma en distintos sectores que vienen denunciando el avance del narcotráfico.


En ese marco, desde la Pastoral Social de la Diócesis de la Santísima Concepción, alertaron que “lo sucedido en Alberdi no es un hecho aislado, sino un doloroso síntoma del avance implacable del narcotráfico en nuestro territorio”.


A través de un documento, que lleva la firma de monseñor José Antonio Díaz, obispo de Concepción, la Iglesia Católica reclamó “que no nos gane la indiferencia” frente a esta realidad social.


“Atentos a los signos de los tiempos y con profunda preocupación por el bienestar de nuestras comunidades, queremos expresar nuestra preocupación ante los recientes y dolorosos acontecimientos que involucran a la Municipalidad de Juan B. Alberdi y la presunta vinculación de autoridades con el flagelo del narcotráfico”, planteó el religioso en el escrito, al que Tendencia de Noticias tuvo acceso. Y agregó: “Estos hechos, más otros que se van conociendo, han conmocionado a nuestra provincia y a nuestra Diócesis, y nos interpelan a una profunda reflexión y acción decidida”.


En ese contexto, monseñor Díaz advirtió que “lo sucedido en Juan B. Alberdi no es un hecho aislado, sino un doloroso síntoma del avance implacable del narcotráfico en nuestro territorio”. En el mismo tono, sostuvo que “esta oscura realidad se infiltra en nuestras instituciones, corrompe los cimientos de nuestra sociedad y, lo que es aún más grave, destruye la vida de innumerables personas, especialmente de nuestros jóvenes, quienes son los más vulnerables a sus engañosas promesas”.


“Lo sucedido en Alberdi no es un hecho aislado, sino un síntoma del avance del narcotráfico”, advirtió la Iglesia

El obispo de Concepción dijo que la sociedad se enfrenta hoy a “una red compleja que genera violencia, marginalidad, desintegración familiar y socava la confianza en nuestras autoridades”.


Además, indicó que la presencia del narcotráfico “atenta contra la dignidad humana y el bien común, y su poder económico le permite tejer redes que, como hemos visto, pueden alcanzar incluso a las esferas de Gobierno”.

 


Pedido a la comunidad


Frente a esta cruda realidad, desde la Pastoral Social de la Diócesis de Concepción señalaron que la prevención emerge como un pilar fundamental. “No podemos esperar que la droga llegue a nuestros hogares y comunidades para actuar. Es imprescindible fortalecer las políticas públicas de prevención y atención integral de las adicciones, que aborden las causas profundas de la vulnerabilidad social, la falta de oportunidades y la desesperanza”, agregaron en el comunicado firmado por monseñor Díaz.


El obispo también recalcó que “del amor a la vida humana se deriva el aprecio y estima por los valores que la acompañan y protegen: el cuidado de la salud, la recreación sana en espacios de contención, la integración familiar, la convivencia social, la participación ciudadana y la educación integral”. En la misma línea, monseñor Díaz alentó “a todos aquellos grupos e instituciones que promueven el amor a la vida, a la protección de los derechos, y a aquellos que se esfuerzan por ayudar a quienes son víctimas de la drogadicción”.


Por otro lado, admitió que ningún actor social puede enfrentar este flagelo en solitario. “Toda la comunidad en su conjunto es interpelada por las actuales dinámicas socioculturales y formas patológicas derivadas de un clima cultural secularizado, marcado por el capitalismo de consumo, la autosuficiencia, la pérdida de valores, el vacío existencial, la precariedad de los vínculos y las relaciones”, dijo, recordando palabras del Papa Francisco en 2018.


Reclamo a las autoridades



Para el obispo de Concepción, la complejidad y el alcance del narcotráfico exigen una respuesta unificada y coordinada. En ese sentido, consideró que es imperante que se fortalezcan y se creen nuevas alianzas institucionales entre el Estado en sus tres poderes y niveles. “Es responsabilidad indelegable del Estado garantizar la seguridad, la justicia y el bienestar de sus ciudadanos. Se requiere una acción firme y transparente de las fuerzas de seguridad, la justicia y los poderes ejecutivos para desmantelar las redes del narcotráfico y perseguir a quienes se benefician de él, garantizando la independencia y la ética en su accionar”, subrayó.


El obispo dijo que las instituciones religiosas, educativas, deportivas, clubes y vecinales tienen también un rol fundamental en la contención, la prevención y la promoción de valores. “Su cercanía con la comunidad las convierte en actores clave en la detección temprana y la implementación de acciones preventivas”, explicó.

También convocó a la familia, como primera y fundamental educadora de los niños y jóvenes, a “fortalecer los lazos, el diálogo y el acompañamiento amoroso”.


El referente de la Comisión de Pastoral Social de Concepción agregó: “Como Iglesia que peregrina en la Diócesis de la Santísima Concepción, reafirmamos nuestro compromiso de seguir trabajando incansablemente en la prevención, la asistencia y la concientización”. En el documento, la Iglesia pone a disposición de los tucumanos todas sus “capacidades y recursos para acompañar a las víctimas, promover la esperanza y ser una voz profética que denuncie la injusticia y la corrupción”.


Asimismo, destacaron el trabajo realizado con esfuerzo y valentía evangélica en los Hogares de Cristo, la Granja Santa Mónica, Comedores, los Grupos Esperanza viva y los otros espacios de escucha y acompañamiento que colaboran con la Diócesis de Concepción.


Luego, recordaron palabras del Papa Francisco en 2018: “Las drogas y las adicciones son un obstáculo para el desarrollo humano integral”.


Para finalizar, desde la Diócesis de Concepción exhortaron “a todos los sectores sociales a vivir una jornada de profunda reflexión el día 26 de junio en el que se celebra el Día Internacional de la Lucha contra el Uso Indebido y el Tráfico Ilícito de Drogas porque, para superar las adicciones es necesario tener un compromiso sinérgico, involucrando a las diferentes realidades presentes en la comunidad”.

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