El gobernador Osvaldo Jaldo se refirió este jueves al grave incidente registrado el pasado martes en una escuela de Acheral, donde un menor hirió a otro de una puñalada en medio de una pelea, y dijo que se trató de “un hecho aislado”, teniendo en cuenta que “en la provincia hay 500.000 alumnos y 1.000 escuelas”.
De todas maneras, admitió que este tipo de episodios de violencia escolar, por los que Tucumán volvió a ser noticia nacional esta semana, son algo “inconcebible” y que requieren atención por parte del Estado.
En ese sentido, recordó que, en 2024, para ponerle un límite a las recurrentes peleas de alumnos a la salida de los colegios en la Capital, dictó un decreto para que la Policía pueda actuar con fines disuasivos en esos casos y esté facultada para trasladar a los menores que protagonicen esos hechos para ponerlos a disposición de la Justicia. La norma también instruye a los establecimientos educativos a que apliquen sanciones disciplinarias correspondientes y hace responsables a los padres de los chicos involucrados en las trifulcas por los daños que estos podrían provocar.
“No es la primera vez que los chicos, que los jóvenes estudiantes, se pelean en la calle o en un establecimiento educativo. Hasta el año pasado en la provincia hubo graves conflictos y no en el interior, como ahora, no en Acheral, sino en la Plaza Urquiza, en el centro de San Miguel de Tucumán, con batallas campales de chicos y jóvenes a este gobernador no le ha temblado el pulso de sacar un instrumento y de poner de alguna manera penas muy duras en cuanto a este tipo de peleas”, subrayó Jaldo. Y agregó: “La verdad que es inconcebible y que no tiene explicación que los chicos salgan del colegio y se enfrenten a alumnos de diferentes establecimientos. Eso lo hemos solucionado en 24 horas y por el instrumento que hemos sacado”.
El gobernador admitió que ese decreto recibió numerosas críticas. “Algunos constitucionalistas se animaron a opinar que era inconstitucional, que era arbitraria y que era excesiva la medida del gobernador. Fíjense, al otro día no hubo un chico peleando en toda la provincia de Tucumán”, enfatizó.
Sobre el hecho puntual del incidente ocurrido en Acheral, donde un menor de 14 años hirió de una puñalada a otro de su misma edad mientras hacían actividad física en el patio de una escuela, Jaldo dijo que se trata de “un hecho lamentable en el que ya están trabajando el Poder Judicial y el Ministerio de Educación”.
Tras agradecer “a Dios porque el chico (que recibió la puñalada) está fuera de peligro”, el titular del Poder Ejecutivo se comprometió a adoptar las acciones necesarias para que el agresor sea sancionado. “No porque sean menores crean que no van a recibir sanciones. Yo personalmente me voy a encargar de acompañar al Poder Judicial para que se apliquen las sanciones. No vamos a tolerar ese tipo de peleas en la provincia de Tucumán”, remarcó.
Por último, insistió en que este fue un hecho aislado. “Por eso hay que tener mucho cuidado cuando se informa y hay que tener mucho cuidado con la intencionalidad que se informa. Tenemos 500.000 chicos, 1.000 escuelas y un caso aislado”, concluyó.
El caso
El pasado martes, un menor de 14 años apuñaló a otro chico, de su misma edad, tras protagonizar una violenta pelea, que sus compañeros filmaron con las cámaras de sus teléfonos celulares mientras los alentaban.
El episodio ocurrió minutos antes de las 15 en el patio de la Escuela de Comercio “Ingeniero José Álvarez Condarco”, donde el agresor y la víctima realizaban actividades físicas. Por razones que no fueron precisadas, los menores se trenzaron en una pelea a golpes de puño y patadas, cuando el agresor extrajo un arma blanca y le asestó un puntazo en el abdomen a la víctima.
Como consecuencia del ataque, la víctima fue llevada por las autoridades del establecimiento escolar al CAPS de Acheral, tras lo cual se dispuso su traslado en ambulancia hasta el Hospital del Niño Jesús de la capital tucumana, donde se le diagnosticó una herida punzante de arma blanca en el tórax, del lado derecho. El chico de 14 años quedó internado en terapia intermedia de ese nosocomio y, según el último parte médico, está fuera de peligro.
En tanto, el agresor permanece libre y fue entregado en custodia a sus padres por decisión de la Justicia, debido a que por su edad es inimputable.
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