No supo hablar en el mismo idioma que el club: Diego "Traductor" Flores deja San Martín

Se acabó el ciclo de Diego Flores al mando de San Martín. Un dilema bastante importante en cómo rotular el hecho de su etapa por el "Santo": hizo una campaña histórica consiguiendo 81 puntos, pero a la hora de los bifes, el equipo fue una pluma en lo futbolístico y mental, y el DT tuvo incidencia en eso, tocando la táctica contra Aldosivi y planteando una idea mezquina contra Gimnasia de Mendoza en La Ciudadela, derrochando la ventaja deportiva tras el gol de Silba, que jamás tuvo reacción por parte del local.

La RAE define como fracaso al resultado adverso y contrario de lo buscado por una organización (en este caso institución) y calza perfecto para este equipo de Diego Flores, que nunca supo hablar el mismo idioma que los hinchas, anulando toda posible conexión. El fanático, a pesar, de los resultados, no estuvo 100% convencido del cordobés en el banco de suplentes. Y en cierto punto, tampoco los futbolistas o su propio cuerpo técnico, con jugadores que se fueron ventilando problemas internos (Zafarana) o hasta cambiando asistente técnico en medio de la temporada como Juan Manuel Cavallo.

Sin dar la cara, pensando más en volver a sus pagos y firmar con el equipo de sus amores como Belgrano de Córdoba, la soberbia de Flores baja la ventanilla del dialógo con la gente de San Martín, denotando que sintió que no fue bien valorado su trabajo y escapando de los micrófonos para no tener que dar explicaciones. Se rumorea incluso, que hasta consiguiendo el anhelado objetivo, el hombre de 43 años no hubiera seguida, haciendo más evidente la relación con los futbolistas y los dirigentes.

El "Traductor" se va con 44 partidos dirigidos en San Martín, con 26 victorias, 10 empates y 8 derrotas. A pesar de ser pocas caídas, el peso de las mismas terminan trascendiendo más allá del número. Un equipo eficaz y sólido defensivamente (excepto en las citas díficiles) que con sus 51 goles a favor indica que concretar no era uno de los fuertes de este equipo, teniendo un promedio de 1,15 de gol por partido, dato muy bajo teniendo la calidad de nombres que tiene este San Martín. Además, solo recibió 28 goles, volviendo a evidenciar un juego más defensivo y que tuvo a Sand como baluarte.