Tucumán aceleró el gasto público mientras recibe más fondos nacionales, en un contexto de ajuste dispar

La arena política nacional se encuentra en ebullición, marcada por la propuesta de diálogo que el gobierno de Javier Milei, tras los resultados electorales en Buenos Aires, extendió a los gobernadores. Un eje central de esta conversación inminente, o al menos así lo desean las administraciones provinciales, es el envío de fondos y la reconfiguración de la coparticipación. Mientras algunos mandatarios, como el salteño Gustavo Sáenz, ya se desmarcaron del convite, el tucumano Osvaldo Jaldo optó por una postura de prudencia, solicitando a la gestión libertaria mayor claridad y precisiones sobre los temas que se abordarán en estas cruciales reuniones.

En este contexto de redefinición de las relaciones fiscales, un reciente informe, elaborado por la Fundación Federalismo y Libertad, reveló que el "esfuerzo fiscal hoy parece sostenerse solo a nivel nacional", ya que la mayoría de las provincias comenzó a revertir el sendero de ajuste iniciado en 2024. Particularmente, Tucumán se destaca como una de las jurisdicciones que más rápidamente abandonó la disciplina del gasto, pese a haber sido una de las más favorecidas por el incremento en las transferencias automáticas por parte de la Nación.

El estudio, al que tuvo acceso Tendencia de Noticias, que se propuso "investigar cómo ha evolucionado el gasto público nacional y de cada provincia en términos reales en los últimos dos años, con el objetivo de conocer la magnitud del ajuste real provincia por provincia y de analizar cuánto representa el gasto actual sobre lo que fue en 2023", arroja una compleja dinámica de disparidades. Si bien en 2024 "todas las provincias realizaron un fuerte ajuste", la tendencia se modificó abruptamente en el primer trimestre de 2025.

El caso de Tucumán

En el panorama provincial, de acuerdo al informe confeccionado por Bernabé Salas Arón, Sofía Manzur Ester Ladetto y Pablo Pero, se exhibe una de las trayectorias más notables en el abandono del ajuste fiscal. En 2024, la provincia superó el promedio interprovincial de contracción del gasto, que fue del 18,8%, al registrar una reducción del 24,3% de su erogación pública. Sin embargo, la perspectiva cambió drásticamente al iniciar el año en curso. El informe subraya que, al observar el primer trimestre de 2025, Tucumán se posicionó como la segunda provincia con el mayor incremento de gasto a nivel nacional, con un "aumento del 42,6% respecto al mismo período de 2024". Este dato la ubica en un grupo selecto de jurisdicciones que "más rápidamente dejó de sostener el esfuerzo por reducir el gasto público".

Lo paradójico de esta expansión del gasto tucumano radica en que se produjo en un escenario de considerable beneficio en la recepción de fondos nacionales. El documento precisa que "Tucumán fue la segunda provincia que más se vio beneficiada en este incremento" de las transferencias automáticas de la Nación. De hecho, al comparar el acumulado enero-marzo de 2024 con el mismo período de 2025, "esas transferencias se incrementaron un 16,1% en términos reales" a nivel interprovincial. El análisis destaca con énfasis que "mientras que los fondos nacionales recibidos por las provincias subieron un 16,1% interanual real (1er Trim), el gasto total provincial en promedio creció un 23,4%". En esta dinámica, Tucumán se alza como un ejemplo paradigmático de que "las provincias eligieron volver a aumentar su gasto público con respecto a la Nación", a pesar de que esta última "recaudó más, transfirió más, y gastó menos (y así redujo impuestos)".

Más allá del incremento interanual, el análisis de la recuperación del gasto pre-ajuste también coloca a Tucumán en una posición destacada. La provincia "ya volvió al 88,8% del gasto de 2023, lo que la ubica en el puesto número 8 del ranking nacional", evidenciando una rápida restauración de los niveles de gasto anteriores a la implementación de las políticas de austeridad.

Un ajuste desparejo

El análisis integral del informe confirma que el "ajuste de 2024 fue generalizado" a lo largo del país, pero la cohesión en la contención del gasto se diluyó en 2025. Durante el año anterior, "todas las provincias realizaron un esfuerzo para reducir su gasto en términos reales respecto de 2023". La magnitud de esta contracción fue heterogénea, con San Luis (-40,7%), Santiago del Estero (-27,8%) y La Rioja (-28,1%) liderando los recortes más profundos, mientras que Neuquén (-4,0%), CABA (-5,3%) y Santa Cruz (-8,2%) aplicaron ajustes más moderados. En contraste, la Nación exhibió una significativa reducción, con su gasto sin prestaciones de la seguridad social cayendo un 34,8% y el gasto total un 27,8%.

Sin embargo, la "foto cambia en 2025". En el primer trimestre, casi la totalidad de las provincias, con la única excepción de San Luis, "comenzaron a expandir nuevamente su gasto" en términos reales. Provincias como Santiago del Estero (64,0%), Corrientes (39,5%) y Chubut (38,5%) mostraron los incrementos más pronunciados. La Nación, por su parte, mantuvo su firmeza fiscal, no solo sin revertir el ajuste sino "continuando reduciendo sus erogaciones, logrando una reducción del gasto público sin prestaciones de la seguridad social del 7,8%". Esta dinámica es fundamental, ya que "los fondos provinciales surgen esencialmente de los recursos de origen nacional (RON)", constituyendo entre el 70% y el 80% de su financiamiento, con la particularidad de que "la parte discrecional prácticamente ha desaparecido" en la nueva gestión.

Al comparar el gasto del primer trimestre de 2025 con el mismo período de 2023, algunas provincias como Neuquén (106,0%), Corrientes (105,4%) y Santa Cruz (105,0%) no solo recuperaron, sino que incluso "superaron el nivel de gasto que tenían antes del ajuste". En antítesis, "la Nación, sin prestaciones de la seguridad social, en cambio, es la que menos recuperó: hoy está a un 59,8% de su gasto real de 2023", y en un 71,0% si se considera el gasto total, posicionándose "entre las 3 administraciones que menos recuperaron su gasto del primer trimestre de 2023".

Regionalmente, el promedio interprovincial de aumento del gasto en el primer trimestre de 2025 alcanzó el 23,4%. Las regiones centrales, como la Pampeana (10,3%) y Cuyo (10,4%), registraron incrementos por debajo de la media. En contraste, "las provincias del norte y del sur gastaron más que el promedio (NEA, 25,5%; NOA, 31,1%; y Patagonia, 34,1%)". La particularidad de las provincias patagónicas, que "achicaron poco su gasto real en 2024 y están en el grupo de las que más crecieron fiscalmente en los primeros tres meses de 2025", podría estar ligada a su "dinámica económica propia, posiblemente centrada en la explotación petrolera".

En suma, el informe concluye que el "esfuerzo fiscal no es parejo: la Nación se mantiene en el camino del ajuste, pero varias provincias avanzan en la dirección contraria". Esta divergencia en la política de gasto entre el gobierno central y las jurisdicciones subnacionales emerge como un factor crítico en el diseño de la estrategia económica y en la construcción del diálogo político nacional, especialmente en lo que concierne a la delicada balanza de los recursos federales.