SADRA encendió la alarma y acusó a la AFA de manipular el arbitraje

El clima en el fútbol argentino volvió a tensarse. A la controversia generada por la sanción contra Estudiantes por el gesto hacia Rosario Central, se sumó ahora un fuerte pronunciamiento del Sindicato de Árbitros Deportivos de la República Argentina (Sadra), que cuestionó con dureza a la AFA y al sistema de designaciones arbitrales. En un documento titulado “No estamos solos”, el gremio denunció prácticas que, según señalan, han deteriorado la confianza en el arbitraje.

La conducción sindical, liderada por Guillermo Marconi —alejado de la estructura arbitral desde la llegada de Claudio Tapia—, acusó a la casa madre del fútbol local de ejercer presiones, manipular designaciones y permitir irregularidades que se habrían repetido durante los últimos siete años. Sadra remarcó que incluso cuando las situaciones involucraron a jueces propios, las presentaciones fueron elevadas ante los organismos correspondientes sin recibir respuestas formales.

El comunicado también apuntó a las consecuencias que, aseguran, sufrieron numerosos árbitros. Según el gremio, varios jueces vieron frenado su desarrollo profesional o perdieron oportunidades de dirigir, a pesar de contar con fallos judiciales que respaldaron su actividad. Además, señalaron que la exclusión del Sadra del esquema oficial y la creación de “estructuras paralelas” dañaron seriamente el funcionamiento del arbitraje en todas las categorías.

Entre los episodios recientes que reavivaron el conflicto, el sindicato mencionó el desempeño de Sebastián Gariano en el cierre del Torneo Clausura, donde su actuación en un partido de Barracas Central generó cuestionamientos de jugadores, dirigentes y simpatizantes. Para la entidad gremial, esta clase de hechos refleja un problema estructural que, tras años de reclamos judiciales y administrativos, “la sociedad recién ahora empieza a dimensionar”.

El texto finaliza con un llamado urgente a reconstruir la credibilidad del sistema arbitral. Sadra reafirmó su compromiso con la ética, la transparencia y la profesionalización, e instó a todos los sectores del fútbol argentino a trabajar en conjunto para recuperar un escenario que consideran seriamente afectado. “Decir basta ya no alcanza —señalaron—: es momento de actuar”.